Aunque Rajoy llegó al Gobierno prometiendo que iba a acabar con el problema del desempleo, la última Encuesta de Población Activa refleja que aún hay casi 4,8 millones de españoles en el paro, de ellos 81.600 en la provincia de Almería. Con estas cifras, resulta evidente el fracaso de la gestión del PP en materia laboral. Rajoy podrá presumir en Europa de haber recortado derechos hasta límites inhumanos, pero lo cierto es que esos recortes no han servido para solucionar el principal problema que tiene nuestro país.
Este fracaso se explica por la actitud con la que el PP ha afrontado el problema: mirando para otro lado y esperando que la mejora de la macroeconomía lo solucionara todo. Sin embargo, como su receta económica no ha surtido efecto –Rajoy sigue prometiendo más y más recortes a Europa–, en nuestro país los parados se siguen contando por millones.
No podrán decir en el PP que nadie los avisó. Los socialistas hemos pasado cuatro años reclamando medidas efectivas para crear puestos de trabajo. Hemos pedido hasta la saciedad un plan especial de empleo para Andalucía que incentivara la creación de oportunidades en nuestra tierra y el Gobierno central se ha negado. En la Diputación de Almería y en muchos ayuntamientos, como el de la capital, también hemos pedido planes de empleo y la negativa de los gobiernos del PP ha sido constante.
La Junta de Andalucía ha sido la única administración que, en este tiempo, ha puesto en marcha programas específicos para la creación de empleo, aunque no tantos como hubiese querido, ya que el Gobierno central le ha recortado a Andalucía el dinero para políticas activas de empleo en la espeluznante cifra de 1.600 millones de euros.
Esto no puede seguir así. Nuestro país necesita un gobierno que ponga en marcha un plan de choque para el empleo, con medidas específicas para los colectivos más maltratados: los parados de larga duración, los mayores de 45 años, las mujeres y los jóvenes. Para ellos, el PSOE propone que las empresas que los contraten tengan bonificado el 100% de la Seguridad Social el primer año y el 50% el segundo. Además, nos comprometemos a poner en marcha un plan de formación para los 700.000 jóvenes sin trabajo que han abandonado los estudios sin haber acabado la ESO y aprobaremos un plan de empleo público, que dé a estos colectivos la oportunidad de reengancharse al mercado laboral.
Este fracaso se explica por la actitud con la que el PP ha afrontado el problema: mirando para otro lado y esperando que la mejora de la macroeconomía lo solucionara todo. Sin embargo, como su receta económica no ha surtido efecto –Rajoy sigue prometiendo más y más recortes a Europa–, en nuestro país los parados se siguen contando por millones.
No podrán decir en el PP que nadie los avisó. Los socialistas hemos pasado cuatro años reclamando medidas efectivas para crear puestos de trabajo. Hemos pedido hasta la saciedad un plan especial de empleo para Andalucía que incentivara la creación de oportunidades en nuestra tierra y el Gobierno central se ha negado. En la Diputación de Almería y en muchos ayuntamientos, como el de la capital, también hemos pedido planes de empleo y la negativa de los gobiernos del PP ha sido constante.
La Junta de Andalucía ha sido la única administración que, en este tiempo, ha puesto en marcha programas específicos para la creación de empleo, aunque no tantos como hubiese querido, ya que el Gobierno central le ha recortado a Andalucía el dinero para políticas activas de empleo en la espeluznante cifra de 1.600 millones de euros.
Esto no puede seguir así. Nuestro país necesita un gobierno que ponga en marcha un plan de choque para el empleo, con medidas específicas para los colectivos más maltratados: los parados de larga duración, los mayores de 45 años, las mujeres y los jóvenes. Para ellos, el PSOE propone que las empresas que los contraten tengan bonificado el 100% de la Seguridad Social el primer año y el 50% el segundo. Además, nos comprometemos a poner en marcha un plan de formación para los 700.000 jóvenes sin trabajo que han abandonado los estudios sin haber acabado la ESO y aprobaremos un plan de empleo público, que dé a estos colectivos la oportunidad de reengancharse al mercado laboral.
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