viernes, 30 de septiembre de 2016

En los últimos años, el Gobierno central se ha dedicado a castigar a los autónomos con continuas subidas de impuestos, entre ellas el brutal incremento del IVA, que llegó a ser del 8 al 21% para algunas actividades y que será recordado largo tiempo por las nefastas consecuencias que tuvo para los pequeños negocios, muchos de los cuales se vieron obligados incluso a echar el cierre.

Frente un PP que se ha mostrado insensible, los trabajadores por cuenta propia han tenido en este tiempo al Gobierno andaluz como su principal aliado. Con la idea de apoyar a un sector que es uno de los pilares de la economía andaluza, ya en 2015 la Junta de Andalucía publicó un decreto de medidas urgentes que ha permitido conceder ayudas por valor de 12,3 millones de euros a 3.235 autónomos de toda Andalucía, 350 de ellos de la provincia de Almería. Además, ahora acaba de anunciarse que, una vez que estas ayudas estén abonadas en su totalidad –tras un trámite que se ha visto alargado por las limitaciones establecidas en la normativa estatal y europea–, la Junta publicará una nueva orden de ayudas, dotada con 40 millones de euros y que llegará a más de 10.000 beneficiarios.

A través de esta orden, que está previsto que se publique en las próximas semanas, se incentivará el emprendimiento en trabajo autónomo, así como a las personas trabajadoras que hayan permanecido dadas de alta en el régimen de autónomo antes de la publicación de la norma. Concretamente, según ha avanzado el consejero de Economía, el decreto incluirá acciones para mejorar la competitividad en las empresas de trabajo autónomo, como son las ayudas para favorecer la unión de autónomos; el apoyo a la creación o consolidación de unidades de trabajo autónomo que, promovidas por universitarios, implanten o desarrollen proyectos innovadores; y ayudas a la continuidad para quienes, manteniendo su empresa, quieran cambiar de actividad económica. Además, también se otorgarán ayudas para la contratación indefinida y para la conciliación de la vida profesional y personal, una de las grandes necesidades de este sector.

Se trata de apoyar a un colectivo al que pertenecen más de 500.000 andaluces y que juega un papel esencial en la creación de puestos de trabajo y, por lo tanto, en la marcha general de nuestra economía.

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