El desinterés del Gobierno de Rajoy con la provincia de Almería ha tenido como consecuencia la paralización casi absoluta de las infraestructuras que teníamos pendientes de construir, amén de que el Gobierno tampoco avanzara en la toma de otras decisiones –éstas sin apenas coste económico– que también habrían permitido resolver algunos de los graves problemas que padecemos los almerienses. Durante cuatro largos años, en Almería nos dedicamos a esperar las inversiones que el Gobierno prometía periódicamente, pero que nunca llegaban, hasta completar una Legislatura que, para nuestra provincia, ha pasado en blanco.
Como consecuencia de esa inacción del último Gobierno, a día de hoy seguimos teniendo exactamente los mismos problemas que hace cuatro años, además de otros nuevos, generados por las malas decisiones de los dirigentes del PP. La situación resulta, a estas alturas, insostenible y por este motivo los socialistas hemos decidido no esperar ni un minuto más y aprovechar la constitución de las Cortes Generales para intentar que se den pasos adelante para nuestra provincia desde el poder legislativo, al margen de que el Gobierno se encuentre en funciones.
De este modo, las primeras iniciativas que vamos a registrar en estos días responden a tres de los problemas más urgentes que hemos identificado en materia de infraestructuras. La primera de ellas se refiere a la desaladora de Cuevas del Almanzora, de la que no hemos vuelto a tener noticias desde que se la llevara por delante la riada de 2012, lo que constituye un retraso inadmisible.
Junto a esta cuestión, tenemos también el grave problema de las comunicaciones por tren. Lo primero que hemos pedido, en este tema, es que se retomen ya las obras de construcción del AVE, después de que llevemos medio año esperando ver máquinas en el único tramo que está adjudicado. Pero, además, también hay que mejorar –y hay que hacerlo ya– el servicio de tren convencional. Para ello, hemos vuelto a pedir que se coloque un intercambiador de ancho en Granada que nos permita enlazarnos con el resto de España, que podamos utilizar el tren-hotel que va de Granada a Barcelona y que se mejoren los horarios del tren con Madrid. Confiamos en que la nueva composición del Congreso y el Senado nos permita avanzar en estos asuntos en un plazo de tiempo breve.
Como consecuencia de esa inacción del último Gobierno, a día de hoy seguimos teniendo exactamente los mismos problemas que hace cuatro años, además de otros nuevos, generados por las malas decisiones de los dirigentes del PP. La situación resulta, a estas alturas, insostenible y por este motivo los socialistas hemos decidido no esperar ni un minuto más y aprovechar la constitución de las Cortes Generales para intentar que se den pasos adelante para nuestra provincia desde el poder legislativo, al margen de que el Gobierno se encuentre en funciones.
De este modo, las primeras iniciativas que vamos a registrar en estos días responden a tres de los problemas más urgentes que hemos identificado en materia de infraestructuras. La primera de ellas se refiere a la desaladora de Cuevas del Almanzora, de la que no hemos vuelto a tener noticias desde que se la llevara por delante la riada de 2012, lo que constituye un retraso inadmisible.
Junto a esta cuestión, tenemos también el grave problema de las comunicaciones por tren. Lo primero que hemos pedido, en este tema, es que se retomen ya las obras de construcción del AVE, después de que llevemos medio año esperando ver máquinas en el único tramo que está adjudicado. Pero, además, también hay que mejorar –y hay que hacerlo ya– el servicio de tren convencional. Para ello, hemos vuelto a pedir que se coloque un intercambiador de ancho en Granada que nos permita enlazarnos con el resto de España, que podamos utilizar el tren-hotel que va de Granada a Barcelona y que se mejoren los horarios del tren con Madrid. Confiamos en que la nueva composición del Congreso y el Senado nos permita avanzar en estos asuntos en un plazo de tiempo breve.
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