sábado, 13 de julio de 2013

Sin alma


El PP puede dormir a pierna suelta esta noche. Después de semanas en los que su segunda máxima preocupación, aquella que les quitaba el sueño, era parar el decreto antidesahucios de la Junta de Andalucía, lo han conseguido – su primera ocupación está claro que es rezar para que Bárcenas no siga tirando de la manta y desvelando la posible financiación irregular de su partido y los estupendos sobresueldos que cobran sus dirigentes –.


Parapetados en la Unión Europea como excusa ante una clamorosa mayoría social que respalda la medida del Gobierno andaluz para proteger a las familias de los abusos de la banca y de la sinrazón del PP al negarse a aprobar la dación en pago como solución al problema, el Gobierno de Rajoy –sí, ese mismo que nunca sabrá lo que significa tener problemas para pagar la hipoteca viendo lo que ha estado cobrando de su partido- ha recurrido la norma ante el Tribunal Constitucional. Y el Tribunal se ha pronunciado suspendiendo temporalmente una norma que permite a la Junta de Andalucía expropiar el uso de la vivienda de la que se va a desahuciar a las familias en riesgo de exclusión por un plazo de tres años, permitiéndoles permanecer en la misma.

Dicen Rajoy y la fiel reproductora de sus argumentos en Andalucía, la almeriense Carmen Crespo, que esta norma puede ser inconstitucional y que, atención, pone en peligro la estabilidad de la banca. ¿Ustedes se creen cualquiera de las dos películas que se han montado? Los socialistas no y vemos, simple y llanamente, a un PP sin alma que ha vuelto a aliarse con la banca –no olvidemos la carrera profesional de De Guindos o de Rato-, dejando tirados a los ciudadanos más vulnerables.

El decreto antidesahucios andaluz es plenamente constitucional, no dejen que les distraigan con falsos debates, y ya ha sido tomado como modelo por otras comunidades autónomas. Ese es el gran temor del PP: Que los ciudadanos de este país, más allá de la comunidad andaluza, vean que otro modo de gobernar, desde la izquierda, es posible y que en el mismo las personas están antes que los intereses económicos, se sale de la crisis sin abandonar a nadie por el camino, y Bárcenas no marca nuestro destino sino que lo marca el trabajo para que las familias que lo necesiten puedan permanecer en sus casas y no se vean en la calle.

No hay comentarios:

Publicar un comentario